El pasado sábado 12 de Enero, JOSÉ ORTEGA CANO junto a sus hijos José Fernando y Gloria Camila, los hermanos del diestro: Conchi, Eugenio, Francisco y Mari Carmen, y familiares, se desplazaron hasta Cartagena para asistir a la misa celebrada en memoria de su madre Dª. JUANA CANO RIOS, fallecida en Madrid el pasado 10 de Diciembre. La ceremonia fue promovida y cuidadamente organizada por el Club Taurino de Cartagena que preside D. Manuel Sánchez Juárez, se celebró en la parroquia del castizo barrio cartagenero de San Antón, de donde es originaria la familia Ortega-Cano. Fue un motivo muy especial de regreso y de reencuentros de ORTEGA CANO, para algo tan entrañable en honor de su madre Dª. JUANA, y donde el torero y su familia pudieron recibir, una vez mas, el cariño que les profesan sus paisanos, con un templo abarrotado (mas de 400 personas) de amigos del lugar, y, de los muchos que también se desplazaron de distintos puntos desde dentro y fuera de la región.D. José Arellano –párroco de la Iglesia de San Antonio Abad- ofició la misa, destacando en su homilía los valores de Dª. Juana, como verdadero ejemplo, desde la humildad, de gran cartagenera, siempre, desde la distancia de Madrid o Sevilla, cercana y amante de “su” Cartagena; también resaltó, especialmente, en ella, a la madre ejemplar y unificadora, auténtica “madre coraje” (así la ven los que la conocieron), que educó e inculcó a sus hijos el amor a su tierra, y en los valores eternos de la Familia cristiana, siendo esta cartagenera auténtico símbolo valedor de las mujeres de su generación, ejemplares por su sacrificio y abnegada entrega para sacar adelante a los suyos, en una época de penurias y dificultades. José tuvo en ella, en su madre, a su primera y más fiel seguidora, el apoyo y la fuerza moral más importante.
Ortega Cano, tubo a bien responder unas preguntas y agradecio la labor de los medios de comunicación y difusión.
Agradezco tanta gente como ha participado en la misa por mi madre, la atención y el cariño mostrado hacia a ella y hacia nosotros, tantas muestras de cariño hacia mi, y a demás hemos tenido la suerte de que llegara el Santo, San Antón, al final la ceremonia, y ha sido una cosa muy bonita, la cual no me esperaba, esperaba estar emocionado como lo he estado, pero dentro de la pena, muy contento de que haya sido aquí en nuestro barrio y con toda la gente nuestra.
Muy tristes, han sido triste, porque se junta todo, la falta de Roció, ella es la gran ausente, en principio porque esta muy reciente su fallecimiento, ella era el amor de mi vida, la navidad con Roció era una navidad muy espacial, junto a mi madre por supuesto y con toda mi familia, por lo tanto han sido unas navidades muy tristes, el fin de año, me dio una depresión y me tuve que acostar esa noche, las he pasado muy mal.
INFORMA.- PEPE CASTILLO ABREU/ MORETY
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